1 .- Para mayor
información sobre la colonización inglesa en Belice véase
José Antonio Calderón Quijano. Belice 1663-1821: historia
de los establecimientos británicos del río Valis hasta la
independencia de Hispanoamérica. Sevilla: Victoria-Artes Gráficas,
1994. Véase también, Alicia Contreras Sánchez. Historia
de una tintórea olvidada. El proceso de explotación y circulación
del palo de tinte 1750-1807. Mérida: Ediciones de la Universidad
Autónoma de Yucatán, 1990. Cap. 3.2 Eligio Ancona.
Historia de Yucatán desde la época más remota hasta
nuestros días. Mérida: Imprenta de M. Heredia Argüelles,
1978. T. II, pp. 502-510. 3 Contreras Sánchez,
Historia de una tintórea, p. 129.4 Antonio Higuera
Bonfil. "Fronteras y poblamiento en Quintana Roo. La subprefectura
de Payo Obispo en 1904". Mecanoescrito, Chetumal, Q. Roo, 1990. pp.
3-4.
5 Ibidem, p. 2.
6 Robert S. Chamberlain.
Conquista y colonización de Yucatán, 1517-1550. México:
Editorial Porrúa, 1882. pp 239-260; Ancona, Historia de Yucatán.
cit. T. I, pp. 345-346.
7 Memoria leída
ante el augusto congreso extraordinario de Yucatán por el secretario
general de gobierno el día 18 de septiembre de 1846. Mérida:
Imprenta de Castillo y Compañía, 1846. Véase el documento
13 del censo que se anexa a la Memoria. No hay que olvidar que dadas sus
características de zona de refugio de la mayor parte de ese partido,
existían un número indeterminado de indígenas diseminados
en él. Sin embargo, no representaban una población significativa
para toda esa superficie..
8 Conviene mencionar
que el senado hasta 1841, fungía no como una cámara legislativa,
sino como un órgano consultivo del ejecutivo..
9 Archivo General
del Estado de Yucatán (en adelante AGEY), Congreso, Dictámenes
(del senado), Vol. 1, fjs. 53-56.
11 Véase
este decreto en Francisco de Solano(compilador). Cedulario de tierras. Compilación
de legislación agraria colonial (1497-1820). México: Universidad
Autónoma de México, 1984. pp. 547-550.
12 Vése
este decreto en José María Peón e Isidro Gondra (compiladores).
Colección de leyes, decretos y órdenes del augusto congreso
del estado libre de Yucatán. Mérida: Imprenta de Lorenzo Seguí,
1832. T. I, pp. 100-101.
19 En el apartado
que denominamos "Proyecto Cayo Obispo" aludiremos a las intenciones
de esta política de la Corona española.
20 Véase
el decreto en Peón y Gondra (Compiladores). Colección de leyes...,
T. II, pp. 37-38.
21 Alonso Aznar
Pérez (compilador). Colección de leyes, decretos, órdenes
o acuerdos de tendencia general del poder legislativo del estado libre y
soberano de Yucatán. Mérida: Imprenta del editor, 1850. T.
I, pp. 40-41.
43 Probablemente
el lugar ocupado actualmente por la ciudad de Chetumal.
44 AGEY, Poder
Ejecutivo, Libros complementarios, Vol. 5, fj. 26. AGEY, Congreso, Sesiones,
Correspondencia, Vol. 4, Fj. 61.
45 Nigel Bolland
O. Colonialismo y resistencia en Belice. Ensayos de sociología histórica.
México: Consejo Nacional para las Culturas y las Artes / Editorial
Grijalvo, 1992. pp. 43-49.
46 Para mayor
información sobre este gobierno véase Ancona, Historia de
Yucatán., T. III, pp. 342-381.
47 AGEY, Poder
Ejecutivo, Correspondencia Oficial, Vol. 4, Exp. 6.
48 AGEY, Poder
Ejecutivo, Correspondencia Oficial, Vol. 4, Exp. 6.
49 Aznar Pérez
(compil.). Colección de leyes, op. cit., T. I, pp. 259-260.
50 Ibidem.
51 AGEY, Poder
Ejecutivo, Correspondencia Oficial, Vol. 9, Exp. 13. Los Pueblos. Periódico
Oficial del Gobierno del Estado libre de Yucatán. No. 67.
52 Sobre esto
véase Ancona, Historia de Yucatán, T. III, pp. 382-395.
53 Los Pueblos.
Periódico Oficial del gobierno del Estado Libre de Yucatán.
No. 67 (3 de octubre de 1840).
54 Aznar Pérez(compilador).
Colección de leyes, T. II, pp. 116-119.
55 Véanse
las cifras en Robert Patch. "Descolonización, el problema agrario
y los orígenes de la guerra de castas, 1812-1847". En Othón
Baños Ramírez, Sociedad, estructura agraria y estado en Yucatán.
Mérida: Universidad Autónoma de Yucatán, 1990. p. 73
(cuadro III).
56 Véase
este proyecto en La Gaceta de Mérida. Diario oficial de las sesiones
del Congreso (1824) pp. 1061-1063 y 1074-1078. 57 Se tienen dudas
en cuanto a la identidad de estos mayas quizá había algunos
tipu y, posiblemente, venían del Petén y Yucatán para
refugiarse de la opresión de los españoles como por ejemplo
los que se rebelaron en Cisteil, encabezados por Jacinto Canek, que habían
sido reprimidos en 1761. Bolland, Colonialismo pp. 33-40, 141-147.
58Bolland, Colonialismo,
p. 148. Para mayor información sobre la organización de los
cruzoob y sus relaciones políticas y comerciales con los ingleses
beliceños véase Marie Lapointe. Los mayas rebeldes de Yucatán.
Zamora: El Colegio de Michoacán, 1983. En especial capítulo
3, pp. 73-102.
59 Bolland, Colonialismo,
pp. 149-150; Lapointe, Los mayas, pp. 105-107.
60 .- Su principal
poblado, San Pedro, estaba habitado por unas 350 personas. Otros eran San
José, Chumbalché, Naranjal pero la autoridad de Ek se extendía
hacia el occidente, más allá de Chorro y San Domingo, a algunos
poblados del Petén.
61 La información
utilizada sobre éste prooceso colonizador indígena en Belice
se puede encontrar de manera más amplia en la interesante obra de
Bolland, Colonialismo, Capítulo V "Los mayas y la colonización
de Belice en el siglo XIX", pp. 141-175.
62Ibidem, p. 146.
Para mayor información sobre el "serio obstáculo"
que constituyeron para el capital británico los mayas "tradicionalistas"
del norte de Belice durante el siglo XIX véase Angel E. Cal. "Capital-Labor
Relations on a Colonial Frontier: Nineteenth-Century Northern Belize",
In Branon & Joseph (ed.) Land, Labor and Capital in Modern Yucatán.
Ensays in Regional History & Polítical Economy. Alabama: The
University of Alabama Press, 1991. pp. 83-111..
63 Si bien la
razón de ser original del asentamiento británico en la bahía
de Honduras desde la cuarta década del siglo XVII, fue la exportación
de palo de tinte o de Campeche, árbol del que se extraía una
valiosa tintura, hacia 1770 la drástica caída del precio del
palo en el mercado europeo había obligado a los cortadores ingleses
a incursionar en otro giro: la explotación de la caoba. Con el crecimiento
de la industria mueblera de lujo en Inglaterra, la caoba muy pronto llegó
a ser la principal exportación. Para 1765 la caoba representaba la
cuarta parte del valor de las exportaciones, pero hacia 1770 era la exportación
más importante tendencia que prevaleció hasta el presente
siglo. Bolland, Colonialismo, pp. 36-40.
64Véase
cuadro 1.
65 Para mayor
información sobre este proceso de colonización en la primera
mitad del siglo XX Véase Moisés González Navarro. Raza
y tierra. La guerra de castas y el henequén. México El Colegio
de México, 1979. pp. 277-283; Específicamente para el año
de 1904 véase Higuera Bonfil, “Fronteras...”, pp. 9-21.