En la familia tradicional campesina existe una sana división de trabajo, en donde los hombres se encargan de proveer a la familia con alimentos que obtiene de su milpa o de su trabajo fuera de la comunidad. Las mujeres se encargan de mantener alimentada, sana y limpia, no solamente a su familia, sino también a los animales, puercos, pavos y gallinas que conviven con ellos en el solar.