La Península de Yucatán es una gran plataforma coralífera con poco relieve, en donde aparecen más piedras que tierra. Sin embargo, este fue el fundamento para el desarrollo de la impresionante civilización maya. Ante la imposibilidad de modificar las tierras con herramientas -característico de la agricultura europea-, los campesinos prehispánicos modificaron las plantas y las adaptaron a las tierras. Por eso tenemos una gran riqueza de plantas domesticadas en el área mesoamericana.